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Cuando la cotidianeidad rebasa el absurdo

Nieve negra

Esta semana, el temporal de fríos continentales ha dejado mi ciudad de acogida (sí, soy un pobre emigrado) vestida con un 'manto de blanca nieve'.
Entrecomillo la clásica frase, ya que la nieve es blanca... el primer o segundo día. A partir de entonces, va poniéndose gris. Eso, si no está cerca de las carreteras, ya que entonces se vuelve directamente negra. En cambio, en el campo va quedándose marrón oscuro, al mezclarse con el barro. Por otro lado, la textura pasa de ser algodonosa a ser una especie de granizado blandengue.
En resumen, la nieve está demasiado bien vista. Sólo merece la pena ver la nevada recién caida desde la ventana de tu casa, con la calefacción encendida, y sin tener que ir a trabajar.
Supongo que se pueden hacer analogías con la mayoría de la gente 'encantadora': Atractivos desde lejos, buena prensa, pero en cuanto los ves de seguido más de 2 ó 3 días, ves que son sólo agua cristalizada, en fase de descongelación.

Hala, chanko, inúndame con tus respuestas!

P.D. Por cierto, L, M ó X estoy disponible para vislumbrar el esplendor del macedonio. Hacia las 20? SMS?

10 comentarios

Chanko -

¡Aquí Houston llamando a Mandio...!

Chanko -

Tío, ya me estoy preocupando. O te has muerto, o estás disfrutando de una travesía transatlántica vacacional de varios meses de duración. Da señales de vida, calandraca.

Chanko -

Una semana más tarde, el sufrido público seguía esperando a que alguien saliera al escenario...

Chanko -

Te imagino roncando encima del teclado con un hilillo de baba cayendo sobre la tecla N (de No actualizo Nunca mi página)...

Vamos, campeón, que a estas alturas ya he escrito yo mucho más que tú en TU peich (vale, sólo bobadas, pero lo que importa es la cantidad, ¿no?).

Venga, teclea un poco, no seas asín.

Chanko -

Bueno, y ya que estamos en harina, vamos a pedir explicaciones. Usted dijo lo siguiente:

Bueno, tu respuesta, como es habitual, es un marasmo ininteligible en el que mareas tanto la pelota que al final acabas perdiéndola!

Y como yo no suelo aceptar el dogma bajo ninguna de sus formas, le voy a pedir cortesmente que me explique el contenido de su afirmación, que de momento no es más que un titular.

Hala, cuídate, torpedo. Aguuur.

Chanko -

Te recuerdo que la pasión artística no es un apetito civilizado y manso que deja que le sometas a tus horarios, sino una bestia caprichosa y voraz que tienes que dominar en la medida de lo posible a fin de que no acabe devorando toda tu existencia.

Así que apaga la tele, o la Play Station, o lo que leches uses tú para alienarte (o sea, para poner distancia entre tus deseos y tus posibilidades), ponte música, coge un papel y un boli (nada de ordenador, demasiado riesgo) y empieza a sentir el calorcito. Dentro de un mes serás un yonqui de la palabra.

Bueno, o no hagas nada de esto, pero escribe algo, leches.

Chanko -

Pos nada, ya la cancelo. Me parece que el griego bisexual va a pasar de largo, porque la semana que viene empiezo las clases de nuevo. O sea, que mi tiempo libre se va a convertir en una entelequia anacrónica, una especie de mito atávico, la promesa del nirvana que sólo puede lograrse mediante la supresión del yo... No sé si me explico. ¿Quién me mandará meterme en estos berenjenales?

No sé cómo tomarme tu vocación literaria. Yo me esperaba textos inspirados, poéticos, mordaces... a mares... Vamos, hasta llegué a sospechar que me faltaría el tiempo para leer el producto de tu pasión cronista... Y, bueno, ni tanto ni tan calvo. Vamos, que escribas de una puñetera vez, coleguita.

Mandio -

Bueno, tu respuesta, como es habitual, es un marasmo ininteligible en el que mareas tanto la pelota que al final acabas perdiéndola!
Se aproxima una semana fatal. Tengo síntomas previos de gripe, y en el curro... hasta las orejas: Doble excusa para no dedicarle tiempo a mi vida personal.
Lo de mudarme de página... no sé. Le tengo cariño a esta, que la cree con mis escasas artes. Pasarme a la otra sería como preferir la belleza ajena a la simpleza propia. Y eso sí que no!

Chanko -

Nueva entrada en la página clon y funcionalidad nueva: ¡un tagboard! ¿Que no sabes lo que es? Pues vete y míralo:

http://aaepa.blogspot.com/

Tío, si no estás deseando mudarte es que no corre sangre por tus venas (bueno, eso o que tienes un nivel de triglicéridos de aúpa).

Y que no decaiga, que ya llevamos una semanita sin escribir... Gooo!

Chanko -

Como pasa con tantas otras cosas, es la gente la que transforma la nieve, virginal y hermosa, en un fluido sucio y repelente. Y son precisamente aquellos que no pueden (porque no saben) disfrutar del blanco divertimento, los que evaporan sus virtudes para transformarlas en un incordio general, de modo que no quede ni un solo ser que se ahorre el trago amargo que ellos sufrieron voluntariamente.

Por otro lado, es el de la nieve un ciclo natural de cambio de estado, pero ¿acaso tenemos paciencia o humildad suficientes para respetar algún ciclo, natural o no? ¿O es que tú eres de los que esperan a oír la campanita del horno de microondas para zamparse el inevitablemente insalubre guiso del interior? Pues eso.

Otra cosa: la etimología nos prohíbe llamar encantador a quien acabamos de conocer, sin tener en consideración criterios estéticos exclusivamente. Por lo tanto, esperar que las gratas impresiones sensoriales prolonguen su efecto al pasar al terreno anímico es una ingenuidad propia de quien no piensa en la fortuna como azar sino como deidad, máxime cuando todas las especies de este planeta usan la apariencia y la exhibición como herramientas de la mentira.

Por cierto, a ver si contestas a los mensajes, cacho alacrán. ¿Macedonia magna este X? ¿Cómo lo ves?